La Psicología Positiva nació en 1998 cuando Martin Seligman realizó un discurso presidencial. Desde entonces, se viene impartiendo como asignatura en las universidades, se han creado distintas revistas y asociaciones profesionales, y han aparecido las primeras figuras de la Psicología Positiva (Seligman, Deiener y Peterson, etc.).

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¿Qué es la psicología positiva?

La psicología positiva es aquella que se centra, como su propio nombre indica, en los aspectos positivos de la Psicología y en el desarrollo de los mismos.
 
Siempre se ha tenido una concepción de la Psicología bastante patologicista. Esto es debido a que la gente siempre ha considerado la Psicología como tema tabú, ya que, por regla general, solo se acudía a un psicólogo cuando había algún tipo de problema y/o enfermedad. Hoy en día, todavía sigue siendo así, pero poco a poco la psicología ha ido llegando incluso a la población sana a reclamar sus servicios.
 
La Psicología Positiva nos habla de las emociones positivas; en lo que a ellas se refiere, el desarrollo y fortalecimiento de las mismas se podría considerar como algo preventivo. 
 
Quizás, si se le dedicase más tiempo al desarrollo y fortalecimiento de las emociones positivas, se evitarían ciertos problemas futuros. 
 
Por ejemplo, con la vacuna de la gripe, nos aseguramos de que buena parte de la población no desarrolle ciertas cepas de la gripe (aunque esto no significa que todo el mundo que se vacuna no desarrollará gripe). Con las emociones positivas debería de ocurrir lo mismo. Está comprobado que, si se desarrollan y se fortalecen son indicadores de salud y bienestar. 

¿Podemos incidir sobre nuestras emociones?

La psicología positiva menciona que se deben tener en cuenta los tres factores que determinan la felicidad y sus proporciones: punto de partida de cada uno o genética (50 por ciento); circunstancias (10 por ciento); y actividad intencional (40 por ciento). 
 
Por lo tanto, se podría decir que podemos incidir en una proporción sustancial de nuestra la felicidad. Del mismo modo, se debería tener en cuenta (al contrario de lo que mucha gente piensa) que la felicidad no se relaciona con el género, la edad, el dinero, la etnia o la apariencia física.
 

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Rasgos positivos

La Psicología Positiva nos habla de los rasgos positivos; en lo que a ellos se refiere, se pueden concebir desde diferentes perspectivas, aunque de manera global se podría decir que son los rasgos positivos asociados al bienestar.

  • Virtudes y fortalezas. Búisqueda y desarrollo de las mismas.
  • Optimismo. Las personas optimistas tienden a tener más éxito, a tener mejor salud y menos ansiedad.
  • Resiliencia. Se refiere a la capacidad que tiene el ser humano para reponerse después de que le haya pasado algo malo.

En resumen, la psicología no es solo para aquellas personas que presentan problemas. La psicología también puede servir como desarrollo personal, recuerda que puede servir para evitar o prevenir problemas futuros.