El diálogo interno, ese que tenemos con nosotros mismos, cuando nos hablamos, o puede aparecer también en forma de pensamientos, está influyendo en nuestra forma de actuar, y nos puede estar generando miedos, ansiedad, inseguridades; o por el contrario, ese diálogo interno, puede animarnos a llevar a cabo las exigencias que nos plantea el ambiente.
Delante de una misma situación, las personas se comportan de manera distinta, en parte por lo que somos capaces de decirnos a nosotros mismos. Delante de una situación que me genera ansiedad, no es lo mismo que yo me diga "no voy a poder", "voy a perder el control", "no seré capaz"... a que yo me diga a mi mismo "venga que ya lo has hecho otras veces", "no es tan grave, el miedo pasará", "es normal tener miedo, es desagradable pero acaba", "voy a aprovechar esta ocasión para afrontarlo". Es importante perder el miedo a tener miedo.
Rescata de tu memoria, aunque sean pequeños logros que hayas conseguido en el pasado, y utilízalos como evidencia de que en otras ocasiones has podido con esa situación, o casi has podido, o no ha sido para tanto.
A veces anticipamos sucesos que no tienen porqué suceder. Ahí es importante lo que nos decimos a nosotros mismos.Si vamos anticipando todas las dificultades y no las contrarrestamos con nuestro diálogo interno, lo más probable es que la ansiedad nos supere.
Del mismo modo, el diálogo interno es también muy importante para la gestión del estrés. Si creemos que las demandas que nos genera el entorno (trabajo, familia...) es demasiado para nosotros y no podremos con ello, nos vamos a ssentir superados y muy estresados. En cambio, si generamos un diálogo interno de de capacidad y calma, es más probable que podamos responder más adecuaqdamente a las demandas que se nos están generando. Por lo que te aconsejo que estés atento a lo que te dices y a cómo te lo dices. Háblate con cariño, cómo lo haría la persona que más te ha querido, pensando siempre que es lo mejor para ti. Cambia tu diálogo interno y podrás afrontar muchas situaciones de forma más funcional.