Son muchas las personas que acuden a terapia con el objetivo de aprender estrategias o técnicas de estudio de cara a aprobar exámenes importantes, oposiciones u otro tipo de capacitaciones.

Por ello, en la entrada de hoy vamos a hablar sobre qué son las técnicas de estudio y cuáles son las más usuales. Además, también te daremos una serie de recomendaciones con el objetivo de que puedas preparar un examen de manera eficaz.

¡Empezamos!

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¿Qué son las técnicas de estudio?

Las técnicas de estudio son estrategias y procedimientos útiles de carácter cognitivo que ayudan a memorizar la información y a mejorar el rendimiento.

Es importante detallar cuál es el objetivo del aprendizaje. En este caso sería recordar y retener la información y esto también puede ser conocido por todos  como memorizar. En este sentido, la memorización se basa en:

  1. Fijación o adquisición de conocimientos
  2. Retención o preservación de los conocimientos
  3. Evocación o hacer presente el conocimiento

¿Qué técnicas pueden ayudarnos a memorizar la información (memotécnicas)?

Actualmente, existen una serie de tácticas que ayudan a memorizar la materia. Entre ellas tenemos las siguientes (Cistiernas, s.f.):

  • Asociación. Consiste en establecer relaciones entre conceptos que ya sabíamos y conceptos nuevos. Es importante tener en cuenta que cuantos más conocimientos tenemos sobre algo menos nos costará aprender más sobre ello. Esto es así porque tendremos más facilidades de crear asociaciones entre conceptos nuevos y viejos. Existen diferentes maneras de crear asociaciones: comparaciones, ejemplos, analogías, etc. 
  • Agrupación de  la información. Este tipo de técnica se utiliza cuando la información está fragmentada. Por ejemplo, cuando nos tenemos que memorizar un número de teléfono es más fácil hacerlo de esta manera "987-963-526" que de esta "9-8-7-9-6-3-5-2-6".
  • Exageración. Cuando exageramos las cosas tenemos más probabilidades de memorizarla, ya que las cosas "raras" o particulares se retienen mucho mejor. 
  • Rima y ritmo. Utilizar una canción o un ritmo puede hacer que también tengamos más facilidades para memorizar. Podríamos realizar poesías o cambiarle la letra a una canción conocida. 
  • Contextualización del estudio. Cuando intentamos recordar en qué momento aprendimos cierto tema también nos resultará más fácil recordarlo. Por ejemplo, si estudiamos en una biblioteca podríamos memorizar qué personas teníamos cerca, qué ruido había de fondo, etc.

¿Qué otras técnicas existen teniendo en cuenta la tipología y el tipo de materia a estudiar?

Teniendo en cuenta las sesiones y la tipología de la materia a estudiar, hay diferentes tipos de estudio. Si se hace referencia a las sesiones, hay dos clases de estudio:

  • El concentrado que consiste en estudiar pocos días pero muchas horas
  • Fraccionado que consiste en estudiar muchos días durante pocas horas.  

Es importante destacar que el fraccionado  es más eficiente.

Respecto a la tipología de la materia existen también dos clases:

  • El estudio global. Se produce cuando se realiza la lectura y repetición sucesiva de la materia hasta ser memorizada
  • El estudio por partes. En este lo que se hace es que tras la lectura global la materia, esta pasa a ser dividida por partes para ser memorizada.

En cuanto a estas dos últimas, el estudio por partes es más efectiva.

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¿Qué otros métodos de estudio existen?

Hay también diferentes métodos de estudio: lectura, subrayado, esquema, resumir/repasar y memorizar.

  • La lectura consiste en hacer una lectura  exploratoria o prolectura, es decir, realizar una lectura rápida de la materia y posteriormente una lectura comprensiva. Para la lectura como método de aprendizaje hay que seguir una serie de pautas: reconocer palabras, entender ideas, contrastar el pensamiento del autor con el propio y evaluar lo leído. A la hora de practicar la lectura, hay que tener en cuenta que la velocidad de lectura es irrelevante, pero si se es excesivamente lento leyendo hay que considerar utilizar métodos cuyo objetivo sea reducir el nivel de fijaciones: utilizar un papel que vaya tapando gradualmente todas las líneas que van por debajo del texto a leer, forzando la vista para captar mayor número de palabras y evitar regresiones, evitando mover los labios, etc.
  • El subrayado, tiene como objetivo destacar mediante trazos las ideas fundamentales del texto, hay diferentes tipos: subrayado lineal, subrayado de engarce y subrayado de signos.
  • Los esquemas, hacen una representación gráfica del texto, pueden ser: numéricos, con letras, mixtos, con llaves, de flechas, cuadros sinópticos y diagramas.
  • Resumir/repasar consiste en buscar en el texto términos breves y precisos para repasarlos y repetirlos.
  • Por último, la memorización consiste en adquirir conocimientos y mantenerlos en la memoria; existen varias reglas mnemotécnicas: método de palabra pinza, método cadena, método del relato, método de los lugares y método de las iniciales. 

¿Qué otras cosas se deben tener en cuenta a la hora de estudiar?

Para realizar un estudio eficiente también hay que tener en cuenta:

  • Condiciones ambientales. En cuanto a las condiciones ambientales mencionar las siguientes: sitio de estudio y mobiliario adecuado,  temperatura entre los 17 y 22 grados, luz natural y silencio; se puede utilizar música en ciertos tipos de trabajo, pero es recomendable que sea sin letra.
  • Condiciones físicas. Respecto a las condiciones físicas hay que considerar las horas de sueño (se recomiendan entre 7 y 9), la alimentación equilibrada, la actividad física y la relajación adecuada.

Algunos consejos o tips para preparar exámenes

A la hora de preparar un examen también es importante que tengas en cuenta lo siguiente:

  • Realiza simulaciones. Si el examen es oficial como, por ejemplo, el examen teórico de conducir, es importante que realices exámenes de otros años a modo de simulación. De esta manera podrás comprobar si estás preparado o no o qué tendrías que preparar mejor.
  • Practica técnicas de relajación. Los exámenes pueden producir estrés y ansiedad. Por ello, es recomendable que durante el estudio y los días previos a la prueba realices técnicas de respiración y relajación.
  • No adelantes resultados. Piensa que no sirve de nada torturarse pensando en que no vamos a hacer bien el examen o que vamos a sacar mala nota. Intenta reestructurar estos pensamientos.
  • Quítale importancia a lo que haces. Cuanto más importante y decisivo te parezca el examen, más tensión te pondrás. Por ello, es recomendable que intentes relativizar las cosas y pensar en "qué sería lo peor que podría pasar si no apruebas el examen".
  • Prepárate a nivel mental. Como hemos comentado, es recomendable que estudies algunas técnicas de relajación que realices un entrenamiento de reestructuración cognitiva, etc. 

 

Referencias bibliográficas y más información en:

  • Cisternas, J. (s.f.). Programa autoaplicado para el control de la ansiedad ante los examenes. Universidad de Almeria. Recuperado de web.
  • López Mejías, M., Jústiz Guerra, M., y Cuenca Díaz, M. (2013). Métodos, procedimientos y estrategias para memorizar: reflexiones necesarias para la actividad de estudio eficiente. Humanidades Médicas, 13(3), 805-824. Recuperado de scielo.sld.cu